Project Description
FOTOGRAFÍA DE CALLE
La fotografía de calle pretende captar el hecho de que la vida urbana está llena de imágenes y de momentos únicos e irrepetibles.
la fotografía de calle es un tipo de fotografía que se realiza en un lugar público como una calle, una plaza o incluso en el metro o el autobús. Los fotógrafos callejeros a menudo se centran en la vida cotidiana de los extraños más que en un evento como haría un fotoperiodista.
Los fotógrafos callejeros intentan todo lo posible para pasar inadvertidos. La meta de la fotografía callejera es contar una historia en una fotografía tomada en la calle de forma espontánea. La historia y el sujeto son posiblemente los aspectos más importantes de una buena toma de la calle. Henri Cartier-Bresson, es posiblemente el mejor fotógrafo de este estilo fotográfico.
El grupo de fotografía de calle de la Agrupació Fotogràfica de Catalunya ha hecho una pequeña elección de las últimas fotografías que han hecho en las numerosas salidas que están realizando.
Si quieres participar en las salidas de este grupo tan dinámico, asóciate.
SALIDAS DEL GRUPO DE STREET
PARQUE DE LES TRES XEMENEIES – PARAL·LEL – SANT PAU DEL CAMP Y ENTORNO HASTA LA RAMBLA DEL RAVAL
El 13 de julio pasado hicimos la última salida de la temporada. Nos encontramos en el mismo parque de las Tres Chimeneas del Paral.lel, a las 9 h. De nuevo tuvimos mala suerte y comenzó el día lloviendo. Así que retrasamos la ruta y aprovechamos para desayunar en la terraza cubierta de un bar cercano. Al cabo de media hora o un poco más cesó la lluvia y nos pusimos en marcha. Es verdad que paró de llover, pero se nos quedó un día y una luz fatal.
El itinerario fotográfico empezó en el parque de las Tres Chimeneas, donde nos recreamos bastante. Continuamos después hasta el antiguo Teatro Arnau, abandonado desde hace años y lleno de murales y de grafitis, y nos movimos a su alrededor, principalmente por la entrada a la calle Nou de la Rambla, donde se halla el monumento dedicado a Raquel Meller, y el famoso local de espectáculo pornográfico de la ciudad, el Bagdad. A continuación, decidimos modificar el itinerario previsto y pasamos un buen rato en los Jardines de Sant Pau del Camp, al lado de la mítica calle de les Tápias, una de las más afamadas del antiguo Barrio Chino. Y de allí nos fuimos a hacer algo de culturilla al monasterio románico de Sant Pau del Camp, donde nos extrañó que hubieran tan pocos visitantes. Parece ser que una pieza del románico tan importante como esta, que tan poco abunda en Barcelona, no llama la atención de los turistas. Pero más tranquilos que estuvimos. El único pesar fue que en el claustro habían aprovechado para hacer una exposición de escultura moderna, colocando las piezas entre cada uno de los arcos que sustentan los pilares. Y claro, de esta manera, no pudimos gozar de la vista del claustro en su plenitud. Aunque hay que reconocer que algunas de las esculturas expuestas eran muy bonitas.
Y ya, al salir del monasterio, decidimos acabar el recorrido. Tres o cuatro compañeros continuamos el camino juntos hacia la rambla del Raval, y acabamos la reunión por allí en un bar tomando una cerveza y charlando sobre el fruto de la jornada y, cómo no, de fotografía en general.
LA PARTE DEL PUERTO VIEJO QUE RODEA LAS GOLONDRINAS.
El agua quiere más agua. Así que no fue de extrañar que la mañana del sábado 18 de mayo de 2024, el viejo puerto de Barcelona nos recibiera con lluvia desde primera hora para darnos la bienvenida en nuestra salida fotográfica del día. Por una vez que nos acercamos al mar, hombres de secano como nosotros, hechos a recorrer las calles de la ciudad con nuestras cámaras, temerosas del agua, tuvimos que resguardarnos en el centro comercial Maremàgnum hasta que escampó.
El punto de reunión se había señalado previamente justo al lado de los quioscos en donde se venden los billetes de las Golondrinas de toda la vida. Cuando cesó la lluvia, salió el sol de inmediato. Así que pese a todo tuvimos suerte. Pudimos hacer fotos en las inmediaciones del Maremágnum y después en la zona que abarca la explanada en la que se halla el viejo edificio de Aduanas, ahora en fase de rehabilitación, y el Moll de la Fusta. Algunos incluso llegamos más tarde a la Estación de Francia. Antes bordeamos el mar desde el puerto, de forma que el teleobjetivo nos ayudó a acercarnos a la otra orilla cuando fue de interés.
El lugar pronto se llenó de turistas, con sus pros y contras para la fotografía de calle. Además, a lo largo del recorrido nos encontramos muchas obras preparativas de la Copa América de Vela, así como recintos destinados a atender el evento, que se convirtieron más en un inconveniente que otra cosa, puesto que con todo ello el muelle perdió gran parte de su cotidianidad.
Digamos pues que la salida fue algo accidentada, pero sin exagerar. No obstante, se hizo lo que se pudo, ni más ni menos lo que muestran las fotografías que siguen a continuación.
BORN (centro)
El sábado día 6 de abril de 2024 tuvo lugar esta salida. El punto de reunión se había señalado previamente delante de la puerta principal de la Basílica de Santa Maria del Mar, a la 9 horas.
El barrio es uno de los más emblemáticos de la ciudad, tanto a nivel cultural como de ocio, gastronomía y turismo. Es uno de los más visitados por los amantes de la fotografía d’street. Sobre todo esta parte central que rodea la Basílica de Santa María del Mar, el propio Passeig del Born, que ha sido escenario de muchas películas de época, el antiguo mercado del Born, hoy centro cultural y de memoria histórica, la calle Montcada con el Museo Picasso, el Fossar de les Moreres, y qué decir tiene de los innumerables palacios que abundan en las calles de siglos pasados, hoy restaurados y convertidos en museos, centros culturales e incluso hoteles. Además, los callejones y plazuelas que lo rodean son muy atractivos, y representan parte del patrimonio urbano de la Barcelona más antigua. Y todo ello, repleto de pequeños restaurantes, bares de copas y tiendas de moda de nuevo diseño alternativo. Los turistas alucinan con ese ambiente urbanístico de otra época, y los de casa que podemos ignorar el aluvión de visitantes lo disfrutamos también en gran medida.
No hay que olvidar tampoco el valor histórico del barrio, pues en él se desarrollaron parte de los sucesos acaecidos durante el asedio a la ciudad en el marco de la Guerra de Sucesión Española de 1714. Tiene además la ventaja de que sus barrios colindantes tienen un valor y un atractivo donde se concentra la urbe histórica y donde la vida social de la ciudadanía ha estado siempre presente, como son el Barri Gótic o el de Santa Caterina. En definitiva, que es el telón de fondo quizá más apreciado para practicar la fotografía d’street. Puedes acudir cuantas veces quieras que siempre se descubren nuevos rincones pasados por alto en ocasiones anteriores, que asimismo, con suerte, acogen escenas diferentes que retratar con nuestras cámaras.
Pasamos allí la mañana, y testigo de ello son nuestras fotografías que acompañan el escrito. Y pusimos fin a nuestro recorrido tomando una cerveza en una terraza para reponer fuerzas y contrastar opiniones de la jornada.
@22 y entorno de Poblenou
El sábado día 2 de marzo de 2024 tuvo lugar esta salida. El punto de reunión se había señalado delante de la puerta principal de entrada al DISSENY HUB BARCELONA – DHUB, por Plaça de les Glòries, a las 9 h.
A pesar de que el lugar quizá se presta más a fotografía arquitectónica o de diseño urbano, procuramos llevar la situación a nuestro terreno para practicar fotografía de street. No obstante, cada uno fue libre de retratar lo que mejor le pareció en el ámbito y contexto del barrio. Acordamos previamente no ceñirnos estrictamente a la foto de street, pues el diseño urbano constituye su prima hermana y ambas modalidades se complementan. Así que fuimos improvisando con lo que teníamos a nuestro alrededor. Es esta una zona que, a pesar de dicho «inconveniente», se presta a muchas sorpresas. Además, la ruta la trazamos en dirección este, para llegar así a la parte de Poblenou más cercana a nuestros intereses (calles con un elevado contraste entre la modernidad y el periodo de la industrialización de finales del siglo XIX y principios del XX); existen edificios inhabilitados, almacenes y talleres en mal estado, y solares que tienen como fondo inmuebles con estructuras destacadas y diseños contemporáneos.
Tras verificar el mal estado de las obras de la Plaça de les Glòries, dimos comienzo la ruta detrás de la misma, sentido mar. Bajamos por la calle Rec Boronat hasta encontrarnos con la Universitat Pompeu Fabra (UPF), Campus del Poblenou (interior Plaça Gutenberg), muy interesante (no nos dejaron entrar, otro día será). Y junto a ella la gran plaza la gran plaza que acoge els Jardins de Ca l’Aranyó, desde la que se divisa el entramado de edificios que se alza y caracteriza el novedoso complejo de @22.
A continuación, nos encaminanos hacia la Fundación Vila Casas, junto a la que se hallan las esculturas de los «Guardians», de Xavier Mascaró, en la calle Sancho de Ávila. Esta es una zona bastante transitada y de recreo. Y a partir de ahí, a través de esas fábricas antiguas y almacenes que mencionaba, y los numerosos murales que abundan en las paredes, nos dirigirnos a la Rambla del Poblenou, y su Casino de l’Aliança. Y allí pusimos fin a nuestro recorrido.
CELEBRACIÓN DEL AÑO NUEVO CHINO – Paseo Lluís Companys / Arc de Triomf
La pasada reunión del grupo fue el sábado 3 de febrero de 2024. El punto de reunión se señaló justo debajo del Arc de Triomf, en el paseo de Lluís Companys, a las 9.30 horas.
La actividad tuvo por objeto plasmar fotográficamente el ambiente, vestuario, costumbres, actividades culturales y lúdicas, gastronómicas y de todo tipo celebradas en el marco del Año Nuevo Lunar en Barcelona, el nuevo Año Chino, y participar de su festividad en uno de los muchos actos que se repartieron en la ciudad para dar la bienvenida al Año del Dragón, esta vez de Madera.
En el modus vivendi chino el dragón permanece a lo largo de los siglos como símbolo de sabiduría, amabilidad, armonía y prosperidad, a pesar de que el gobierno de este inmenso país demuestre lo contrario continuamente. Aunque ya sabemos que la política y la vida social de una nación no siempre van de la mano. Y qué decir de la historia de China…
Esta celebración se organizó por un centenar de asociaciones, escuelas y empresas chinas y catalanas, coordinadas por la Asociación de artistas Huaxing, con el apoyo del Ayuntamiento de Barcelona, la Fundación Instituto Confucio de Barcelona, Casa Asia y el Consulado General de China en Barcelona.
Fue una fiesta con mucho valor tradicional, estético y original.
LA FERIA DE REYES DE LA GRAN VÍA – LUCES DE NAVIDAD
La Gran Vía de les Corts Catalanes, en el tramo comprendido entre las calles de Muntaner y Rocafort, se viste de fiesta cada año para dar la bienvenida a la Navidad y, con ella, a la noche mágica de Reyes. Y para ello, sus dos paseos laterales se llenan de paradas de regalos y chucherías, pero sobre todo de juguetes para los niños. También se instalan churrerías en cada esquina, donde hacer un alto para saltarse una promesa y permitirse un capricho, ¡qué narices, un día es un día!, y, ya de paso, combatir el frío con el chocolate caliente que allí mismo se sirve. Abundan asimismo tenderetes de artesanía y otras tiendas callejeras, que aprovechan el consumo de las fiestas navideñas para finalizar el año redondeando el negocio.
La feria de reyes se inició en Barcelona como feria de santo Tomás, y data del año 1877, cuando en aquella época un buen número de vendedores ambulantes acordaron montar sus casetas en la ciudad aprovechando la cercana fiesta del santo. Actualmente se celebra entre el 15 de diciembre y el 6 de enero.
Con el trajín de la gente que pasea o compra sus regalos, se crea cada Navidad un escenario que se ha convertido en una tradición de Barcelona con sabor a churros. Y, cómo no, la Gran Vía se adorna para la ocasión, en especial cuando cae la noche y se encienden las luces navideñas a lo largo de la hilera de tiendas. No es de extrañar así que el espacio y el ambiente que rodea la feria llame la atención suficiente como para realizar un reportaje fotográfico que se nutra del evento. Foto de calle…, foto festiva. Hay que escoger el lugar, recorrerlo, tener paciencia y llamar a la suerte para capturar ese instante improvisado y espontáneo, el que todo fotógrafo de calle se empeña en perseguir. Cotidianidad, historia, expresión, alma…
Y todo eso lo fuimos a buscar allí.